La Liga Solar es una iniciativa de Chilean Solar Energy Research Center en su misión de democraticar el conocimiento y crear conciencia sobre la importancia y el potencial chileno para el uso de la energía solar.
Esta plataforma, dirigida a niños y niñas, busca convertirse en un referente educativo, combinando contenidos digitales, materiales para descargar, interactividad y entretención.
El Sol ha sido adorado como un dios por muchas culturas en todo el mundo. Hoy, gracias a la ciencia, sabemos que es una de las millones de estrellas que hay en el universo y la estrella de nuestro sistema solar. Aunque no es divino, la ciencia confirmó lo que los pueblos indígenas ya habían comprendido: el Sol es la principal fuente de calor, luz y vida para el planeta que habitamos. Como verdaderos “astrónomos” de la antigüedad, observaron que su movimiento en el cielo marcaba los días y las noches, que su presencia variaba durante el año (verano, otoño, invierno y primavera) e identificaron las fechas en que cada estación comenzaba y terminaba. En otras palabras, ¡identificaron los solsticios y equinoccios!
PARA SABER MÁS
Nuestro sistema solar está compuesto por una estrella (el Sol) y 8 planetas que giran a su alrededor. La Tierra es el tercer planeta más cercano al Sol. No todos los planetas son iguales. Hay algunos que son rocosos, como la Tierra, y otros que son gaseosos, como Júpiter. Pero todos giran alrededor del Sol, sin chochar unos con otros, porque cada uno lo hace a través de una órbita distinta. En esta imagen, las líneas imaginarias representan las órbitas en que cada planeta se desplaza en torno al Sol:
Ahora, sólo fijémonos en la Tierra y su órbita. Nuestro planeta realiza dos tipos distintos de movimientos. En el movimiento de ROTACIÓN, gira sobre su propio eje, lo que genera el día y la noche. Imagina que la Tierra es como una pelota y cada vez que gira, una parte de ella se enfrenta al Sol, lo que hace que sea día en esa zona. La otra parte, que está alejada del Sol, está en la noche. La Tierra da una vuelta completa cada 24 horas, por eso tenemos un día y una noche, de 12 horas.
En el movimiento de TRASLACIÓN, en cambio, la Tierra se desplaza alrededor del Sol, describiendo una elipse, como viste en la imagen anterior y al igual que todos los planetas del sistema solar. Una vuelta completa al Sol marca un año, que en el caso de la Tierra dura 365 días.
Como ves en este esquema, las órbita es elíptica (algo así como un círculo achatado) y cuando la Tierra se ubica en los extremos, se producen los solsticios. En el caso del hemisferio Sur, el solsticio de verano se produce el 21 de diciembre, cuando nuestro lado del planeta mira directamente al Sol y marca el comienzo de este ciclo natural. El de invierno se produce el 21 de junio, cuando nuestro lado del planeta no mira al Sol… es el día de la “partida del Sol” para nuestros pueblos originarios o bien, el comienzo de su retorno, porque luego viene la primavera y después el verano.
Mira esta infografía para más detalles sobre los movimientos de la Tierra y su relación con las estaciones: