PARA SABER MÁS  

El Sol es una de las 200 mil millones de estrellas que forman la galaxia que habitamos, la Vía Láctea. Y también una de las 3.200 estrellas que tienen planetas orbitando a su alrededor. Es lo que se ha descubierto hasta ahora, porque aún queda mucho por explorar. Existen muchas otras galaxias, además de la nuestra. Algunos científicos estiman, incluso, que podría haber unas 100 mil millones de galaxias en el universo. ¡Imagina cuántas estrellas!

La Vía Láctea es una galaxia espiral y nuestro sistema solar se ubica en uno de sus brazos, a unos 27 mil años luz del centro de la galaxia. Si el cielo nocturno está despejado y estás lejos de las luces de la ciudad, podrías ver las regiones centrales de la Vía Láctea, como en esta imagen captada desde el radiotelescopio ALMA. Crédito: ESO/B. Tafreshi (twanight.org), CC BY 4.0

Pero, ¿qué es, exactamente, una estrella? 

Una estrella es una esfera de gas caliente que brilla intensamente y cuya energía es producida durante un proceso de fusión nuclear del hidrógeno, que se convierte en helio. Veamos…

Como ya sabes, las estrellas se agrupan en galaxias. Pero las galaxias no sólo contienen estrellas, también nubes de gas y polvo estelar (como se llama al material sólido y que abarca desde partículas microscópicas hasta rocas). Estas nubes se denominan NEBULOSAS y es ahí donde nacen las estrellas. 

La fuerza de gravedad, que actúa atrayendo los centros de los cuerpos, hace que esta nube de gases y polvo comience a girar, concentrando cada vez más hidrógeno. A medida que la velocidad de rotación y la temperatura se elevan debido a la fricción y al choque del hidrógeno, se forma un trozo denso de materia que emite calor. A eso se le conoce como protoestrella y es el primer paso en la evolución de una estrella.

Pero la protoestrella continúa acumulando masa y cuando la temperatura supera los 10 millones de grados Celsius, comienzan las reacciones nucleares en el centro (o núcleo) de la protoestrella y, con eso, la producción de energía. Es el momento en que nace la estrella. 

Así es, el centro del Sol es como un inmenso reactor nuclear: átomos de hidrógeno se mueven a grandes velocidades en todas direcciones. Su choque es inevitable, lo mismo que la fusión de sus núcleos a más de 15 millones de grados Celsius. (¡Esa es la temperatura en el núcleo del Sol! Para que te hagas una idea: es 15 mil veces más caliente que la lava de un volcán, que suele estar entre 1.000 y 1.200 grados Celsius).

Se estima que durante cada segundo, 564 millones de toneladas de hidrógeno se convierten en 560 millones de toneladas de helio en el núcleo del Sol. La diferencia de cuatro millones de toneladas se transforma en energía expulsada hacia el espacio en todas direcciones y nos llega a la Tierra en forma de luz y calor, haciendo posible que existamos. Porque esta energía dio origen a la serie de reacciones químicas que formaron océanos, atmósfera y, finalmente, la vida como la conocemos en el planeta.

Así es nuestro Sol

Aunque el diámetro del Sol es de 1,4 millones de kilómetros (lo que significa que podría contener más de un millón de planetas como la Tierra), se trata de una estrella pequeña si lo comparamos con otras que se han identificado en el universo.

Se encuentra a 150 millones de kilómetros de la Tierra. Para que te hagas una idea: la siguiente estrella más cercana a nuestro planeta es Próxima Centauri, que se ubica a 4,22 años-luz del Sol (¡260 mil veces la distancia Tierra-Sol!). 

Está compuesto por varias capas, como cuando abres una cebolla. Cada una es muy importante y para conocer sus características, hay que distinguir entre las de su zona INTERIOR y las de su zona EXTERIOR, que trabajan juntas para generar energía.

¿Qué es una tormenta solar?

Un fenómeno que ocurre cuando hay una liberación repentina de energía en la atmósfera del Sol. Esta energía puede manifestarse en forma de erupciones solares o de eyecciones de masa coronal. Las erupciones solares son explosiones que ocurren en la superficie del Sol y liberan grandes cantidades de energía, luz y partículas. Sus brillantes destellos de luz pueden ser vistos incluso desde la Tierra. En cambio, las eyecciones de masa coronal (CME) son grandes burbujas de gas caliente y magnetismo que el Sol lanza al espacio. Cuando una CME alcanza la Tierra, puede causar perturbaciones en el campo magnético de nuestro planeta.

¿QUIERES VER UNA ERUPCIÓN SOLAR? MIRA ESTE VIDEO DE LA NASA:

Apuesto a que disfrutaste con la intensidad de los tonos naranja, rojo y amarillo en las imágenes de este video. Pero… la verdad es que el Sol es ¡verde! Las plantas, que reflejan la luz solar, son una evidencia de eso. El Sol emite luz de todos los espectros, pero la atmósfera le da una tonalidad amarillenta, que es lo que vemos desde la superficie terrestre; mientras que desde el espacio, el Sol se ve blanco por su brillo extremo. Sin embargo, si observamos al Sol con instrumentos especiales podremos ver que la mayor parte de la luz que emite está en el rango de longitudes de onda verde. Para aprender más sobre esto, sólo tienes que ir a EL VIAJE DEL FOTÓN.